'La última noche', en esta cena navideña... nada es lo que parece

 

Título. La última noche | Silent Night

Año: 2021           Género. Comedia Negra, Drama.

Dirección. Camille Griffin

Mientras el mundo se enfrenta al apocalipsis, un grupo de viejos amigos se reúnen para celebrar la Navidad en una ídilica casa de campo en Reino Unido.

Incomodados por la idea de la inevitable destrucción de la humanidad, deciden afrontar la situación con tranquilidad, abriendo otra botella de Prosecco y continuando con la celebración... Pero, por mucho que quieran fingir normalidad, tarde o temprano, tendrán que hacer frente a la idea de que podría ser su última noche.

"Deberíamos ser honestos con los niños"

De vez en cuando Netflix nos presenta películas que acaban sorprendiendo con una trama innovadora o que se sale de lo usual. Silent Night o La última noche, dirigida por Camille Griffin y estrenada en el 2021, cumple esta categoría.

Lo ideal para poder embarcarse en esta cinta de 90 minutos de duración

, es, sin duda, no verse siquiera el trailer y

dejarse sorprender por lo que aparenta ser una película de drama navideño, pero que acaba dando un giro sorprendente, mientras nos introducimos en los dramas de un grupo de amigos que se reúnen para una normal cena navideña... solo que es la última.

Comenzando con la trama, vemos a Sandra, James, Alex con sus respectivas familias, viajan a visitar al matrimonio de Nell y Simon, quienes organizan una cena navideña. En un comienzo, la cinta parece ofrecernos el clásico drama de grupo de amigos con pasado en común y, podemos llegar a caer, en la idea de que el guión seguirá una liberación de secretos del pasado.

Pero no, Silent Night da un giro inesperado cuando en cierto momento del film, descubrimos que esta sería la última cena de las familias, debido al acuerdo que estos llegaron de tomar una píldora suicida para evitar una terrible muerte a causa del cambio climático.

Como averiguamos en cierto momento del film, la humanidad se encuentra al borde de la extinción con un terrible gas que causa una aterradora muerte. El gobierno, para evitar el sufrimiento, decidió ofrecerle a la clase media-alta la posibilidad de una píldora capaz de enviarlos a la otra vida sin el menor sufrimiento.

Pero durante la cena, las argumentaciones a favor y en contra surgen, y los temores sobre la muerte hacen su aparición. Y cuando el reloj de las 12, ¿podrán tomar la decisión final?

El punto más fuerte y atractivo de la película, la cual te lleva como una canción navideña a través de la trama envuelta en nieve, luces navideñas, y el aroma festivo que solo una noche vieja puede tener, es sin duda la carga emocional.

Las dudas, el miedo, la incertidumbre, el qué sucede si... el gobierno nos engaña, qué sucede si hay una forma de sobrevivir. Sumado a esta lucha interna que los personajes se enfrentan, y que se ve reflejada finalmente en dos personajes que se contraponen- por un lado Nell, quien ha aceptado la idea de la muerte como al única

forma de salvar a sus hijos del dolor, con la firmeza de su esposo, quien, finalmente, tiene un quiebre donde entiende el peso de lo que debe hacer.

Y, su contra cara,  Art, el hijo del matrimonio, el cual se niega rotundamente a tomar la pastilla, ya que teme que sea un error  que los esté condenando a una temprana muerte.

Es sumamente interesante el utilizar a un niño como el que se enfrenta a lo establecido y lo dictaminado, una especie de referencia a lo que los llevó a esa situación- Nell, Simón y el resto, representan esa vieja humanidad que llevó al mundo al estado actual y Art, acaba mostrándonos como son los más jóvenes, los que finalmente, traerán el cambio.

En general, Silent Night no se va a caracterizar por un guión que nos cambie nuestra manera de ver la vida, pero si consigue ser una película que innova dentro de un género que está bastante dejado de lado, y que, finalmente, consigue atrapar al espectador en esa travesía oscura navideña.

En resumen, "Silent Night" innova en un género olvidado, con un elenco estelar y una trama que consigue atrapar al espectador desde el momento uno. Sin duda una película recomendada, pero no una para ver en las fiestas.