Una joven de 18 años se traslada de Estados Unidos a Londres con su madre y su rico padrastro. Conoce a su hermanastro y, a pesar de sus esfuerzos, se sienten atraídos. Sin saberlo, su padre, del que está separada, la busca tras salir de la cárcel.
"Everyone kept telling me that London would be a fresh star"
por Dani Girwood y Charlotte Fassler vio la luz en Prime el día 13 de febrero de este año.
La ambientación en Londres nos da una estética diferente a la española, y las escenas de persecuciones me parecieron muy bien ejecutadas. Y esto me lleva a la trama, a diferencia de la versión española, donde se sentía cierta desconexión entre las escenas, en My Fault tenemos una línea argumental y una profundidad que hace que tanto el romance central de Noah y Nick se sienta más orgánico, como sus propios personajes.
Las charlas sobre ataque de ansiedad, Noah hablando sobre sus traumas pasados con Noah, o este contandole sobre su familia. Son aportes no-sexuales que profundizan el vínculo para que la evolución de ambos se sienta real.
La química entre los actores es increíble, Asha Banks y Matthew Broome son auténticos y convincentes, y curiosamente son actores no tan conocidos. A Asha Banks seguramente la recuerden por Asesinato para principiantes (2024) que en breve tendréis reseña, y Matthew Broome ha hecho su aparición en Las Bucaneras.
Más allá de eso, supieron integrarse en sus papeles de forma muy orgánica, haciéndonos vivir el romance de primera manos por parte de ambos, y eso es una de las cosas más difíciles de conseguir cuando se tratan de películas de romance.
A pesar de eso, debo destacar que en ambas producciones la química de los actores fue lo que siempre tuvo el mejor puntaje, pero lo que termina destacando a My Fault por su original fue sin duda su guion y ejecución.
Tengo que mencionar la escena de Noah cuando es encerrada en el closet, por favor la actuación de Asha Banks allí fue increíble. Realmente le prestaron especial atención y cuidado a lo que fue el trauma de Noah, que quizás pasó muy de largo en el film original.
My Fault: London ofrece una reinterpretación más profunda y emocional de la historia, presentando personajes más complejos y una narrativa que resuena. Sus actores y la química que comparten terminan de ponerle un listón dorado y nos recuerda que a veces los remake pueden superar a sus originales.
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