'El diablo me obligó', no es como la serie pero igual agrada

Título: El Diablo me obligó | The Devil Force Me
Autor: F.G Haghenbeck
Adaptación: El diablero
Año: 2011

Elvis Infante es un diablero o, lo que es lo mismo, se gana la vida capturano demonios, ángeles caídos y otros seres fantásticos. A bordo de su cadillac, patrulla las calles del peligroso East Side de Los Ángeles siempre preparado para que sus clientes recurran a él para llevar a cabo su exorcismo.

 "Necesitaban recordarle que la vida era corta y el infierno para siempre"

Cuando vi que entre las novedades de Me gusta leer se encontraba “El diablo me obligó” supe que tenía que leerlo. Y es que como gran fanática de la serie, dentro de poco les traigo su reseña, me dije: vamos a ver de dónde nació todo.

Y a pesar de que el libro es MUY diferente a la serie, tanto en trama como en algunos personajes, si conseguí ver la esencia que hizo que me agradara la primera temporada del mismo.

En “El diablo me obligó” seguimos a Elvis Infante, un exconvicto que se pasea por las calles de Los Ángeles ganándose la vida atrapando demonios, ángeles, caribús, y demás seres sobrenaturales que rondan por las calles para causar a veces el caos. Un día, aparece frente a su puerta un Cura que dice que necesita su ayuda, el caso es simple: una mujer dice que su marido ha sido poseído.

A lo largo de las páginas, vemos como Elvis y el Cura trabajan en el caso, al tiempo que las líneas temporales se entretejen y conocemos más del pasado de Elvis, su época en el ejército, como llegó a donde llegó, lo que es “La orden” y un poco más sobre ese misterioso cura que disfruta acostándose con las esposas de sus seguidores.

La serie nos presenta este ida y venida en los tiempos que no consigue marear al lector en ningún momento, pero si llegar a aburrir, habían partes que me daban muchas ganas de saltármelas porque no conseguían mantenerme atrapada y quería directamente que se saltara al tema del caso. O varias partes que perdían el hilo conductor debido a este ida y venida.

El diablo me obligó maneja una gran idea pero la forma de desarrollarla quizás no fue la mejor de todas, siento que si el autor hubiera hecho la historia más lineal, hubiera sido mucho más fácil engancharse con toda la historia y no preferir uno de los dos tiempos por sobre el otro y poder centrarse más en los detalles.

A nivel narrativo, el autor tiende a los detalles pero sin caer en excesos, también utiliza mucho la transferencia de palabras al inglés y al español a la hora de que sus personajes hablen, y aunque en un comienzo parece raro, te acabas acostumbrando.

"El bien y el mal poseen el mismo código postal: el hombre."

Los personajes, exceptuando Infantes, están muy poco desarrollados, solo del Benjamin (el cura) somos capaces de ver un poco más pero hasta ahí. Al parecer en este tomo el autor solo prefirió centrarse en que el lector empatice con el personaje de Elvis, lo que consigue de forma excelente.

También nos explica bastante bien lo que es este nuevo mundo donde lo sobrenatural está ahí y es parte del día a día de todos sus personajes, y nos da mucha curiosidad sobre qué otro tipo de criaturas existen por allí y si es correcto atraparlas a todas.

A su vez, consigue desarrollarnos muy bien los momentos donde suceden cosas como exorcismos y luchas, al igual que la serie se configuran como uno de los mejores momentos para el lector por esa misma razón.

Siento que como un primer libro, no está mal, pero si no hay continuación deja al lector en un aire de desconocimiento sobre muchas cosas que ya estaban servidas para los personajes, pero no para nosotros. ¿Cómo se formó el Hoyo? (donde luchan demonios y otras criaturas por apuestas), ¿Cómo es que descubrieron a los demonios? ¿Cómo es que los atrapan? Son varias interrogantes que nos van surgiendo al no haber visto como es que este “nuevo mundo” se creó, y que hubiera estado bien que el autor se hubiese detenido a explicarnos algunos de ellos.

En resumen, «El diablo me obligó» es una novela entretenida y atrapante, que puede llegar a marear con sus saltos de líneas, pero que si son fanáticos del tema de los demonios y los exorcismos, NO PUEDEN PERDERSE.